Pequeñas empresas principales aspectos a tener en cuenta

En este artículo, vamos a presentar una serie de inconvenientes que va a tener el trabajar con pequeñas fábricas, en primer lugar, nos encontramos con procesos más fragmentados y el servicio está centrado fundamentalmente en aquellos procesos que están teniendo lugar sin mirar más allá. Además de esto, la calidad del producto no suele ser unas de sus principales preocupaciones.

Algunos riesgos

Por norma general, son unos grandes desconocedores del producto a nivel internacional, lo que tiene unos inconvenientes claros. Su producción se suele centrar en países en vías de desarrollo y en mayor medida en el mercado nacional.

Que implicación va a tener a la hora de importar, pues principalmente, que va a desconocer los estándares de calidad que existan en el país de destino de la mercancía, lo cual puede suponer un gran problema. Si bien, no se negarán a escuchar nuestras exigencias sobre la calidad del producto, pero puesto que desconocen los requisitos, trabajan a ciegas, lo que suele terminar en fracaso.

Por lo tanto, existe el riesgo de que el producto final no cumpla con nuestras expectativas y muchos menos con la calidad exigida por nuestro país.

Existencia de un intermediario

El riesgo de trabajar con pequeñas empresas es la existencia de una empresa comercial, la cual va a ser la encargada de gestionar en realidad el proceso de fabricación del producto.

Estas empresas se dedican a contratar a empresas más pequeñas y luego realizan el encargo a varios proveedores, de tal forma, que, ante tal diversidad, la calidad es lo último que se tiene en cuenta.

Como señalamos lo único, que interesa es obtener el producto al “precio” que sea.

Ausencia de controles de calidad

Uno de los mayores problemas es la falta de controles de calidad, proceso fundamental en todo proceso de importación que exija la calidad necesaria.

En términos, muy coloquiales, las fábricas pequeñas, le compran al vecino y lo último que quieren es estropear su relación con éste, aun cuando la calidad de los productos que le adquieren sea cuanto menos dudosa.

Su objetivo, es fabricar, pero no con esto precisamente fabricar con calidad. Su principal consigna es hacer el producto, sea como sea y odian tener que repetir un pedido.

La realidad es que cuando se les encarga un pedido suelen aparecer una serie de problemas, desde los más “inofensivos”, producto sucio, hasta el caso de productos inservible o embalaje roto, esto se debe:

  • Ausencia total de inspecciones de calidad ni del producto ni del proceso.
  • Los trabajadores no tienen los medios necesarios para comunicar a sus superiores los problemas que encuentran, por lo cual, éstos no se solucionan.
  • Los incidentes que ocurran son solucionados por lo escasos técnicos que hay y éstos no quieren saber nada de dichos problemas una vez que ha terminado su horario.

Plantilla irregular

No hay una plantilla definida y estable en el tiempo, sino que ésta sufre constantes cambios. Así cualquier trabajador competente estará poco tiempo en la misma.

Los contactos de ventas que poseen estas empresas tienen un gran problema y es su falta de experiencia, lo que hará que malgastemos mucho tiempo, intentando explicar las especificaciones del producto.

Además, la falta de trabajadores y la poca cualificación de éstos lleva a problemas en el producto, embalaje….

volumen variable de negocio

Si establecemos una relación con una pequeña empresa y esta se encuentra motivada a realizar nuestro producto, y además hace todo lo posible para que así sea, no podemos cantar victoria, puesto que sin un pez más grande llama a su puerta, todo el esfuerzo que hubiesen concentrado en nuestro producto desaparecerá o se verá drásticamente reducido. Centrando sus esfuerzos en el pedido de mayor cantidad que el nuestro.

Por lo dicho, señalamos que se dejan llevar por lo más conveniente en cada momento sin importarles las relaciones ya establecidas, por lo que, esto va a generar gran inseguridad a la hora de establecer una relación comercial.

En el mejor de los casos, nuestro producto sufrirá “únicamente” un retraso, la mayoría de las veces será abandonado.

Comunicación escasa y deficiente

 

La comunicación brillará por su ausencia, y la poca que consigamos entablar será de mala calidad y a cuentagotas. Así, careceremos de información actualizada sobre nuestro producto, de imágenes del mismo y de otros datos muy necesarios a la hora de comenzar una importación.

La información que obtendremos nos será dada en el momento en que el producto este prácticamente finalizado y se requiera el pago para su envío.  

otros problemas

VOLATILIDAD:

Realizamos un proceso de importación con una de estas empresas pero nada nos garantiza que no vayan a cerrar antes de ver finalizado nuestro pedido.

Cada año muchas de estas empresas son cerradas debido a que el mercado tiende a la automatización de los procesos, y las pequeñas empresas, no pueden competir en este sentido con los productores de mayor tamaño y se ven obligadas a cerrar.

DEUDA: 

Otro de los grandes riesgos que existen a la hora de tratar con pequeñas es la existencia de deuda. Pues muchas veces una mala administración de la misma conlleva deudas que hacen que más tarde o más temprano la empresa esté avocada al fracaso.

En el caso de que hayamos entablado una relación con la misma, puede pasar que perdamos nuestro dinero por el cierre de la empresa.