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Se acabo el equiparar el «hecho en China» con mala calidad

¿MALA CALIDAD?

Tradicionalmente se ha relacionado los productos fabricados en China con productos de  mala calidad. Lo que se debía principalmente a una gran cantidad de mano de obra barata y la búsqueda compulsiva de beneficios. Pero parece ser que esta tendencia está llegando a su fin en parte gracias a corrientes como Made in China 2025 sobre la cual ya hemos hablado en alguna ocasión desde Imporalia.

El problema radica en que los estereotipos perduran en el tiempo durante más tiempo que las afirmaciones sobres las que hacen referencia. Un problema similar al que está sufriendo China ya le ocurrió a Japón hace unos cuantos años atrás.

En la actualidad China está fabricando materiales de primera calidad. Pero en algunas ocasiones la losa que pesa sobre ellos de productos y baja calidad es mayor que los datos que confirman que cada día más China está abandonando la senda de la baja calidad, para convertirse en un mercado donde encontremos productos de primera calidad.

Además, solo debemos echar un vistazo a las noticias que suceden en los últimos días, en los cuales algunas potencias están cerrando su mercado a los productos fabricados en China. Muy probablemente, además de una serie de factores políticos tras tales decisiones resida la razón oculta de que los productos chinos se están convirtiendo en una seria amenaza para  los tradicionales productos occidentales.

CLASE MEDIA IMPULSORA DEL CAMBIO

La hipótesis que se maneja es que los productos chinos están mejorando puesto que así lo exige el mercado occidental. Mercado en el que cada vez más es necesario cumplir unos estándares de calidad más exigentes y donde el producto debe de cumplir con un ingente cantidad de normativa sobre los productos.

Pero si bien, este es uno de los motivos no se trata del único. El otro gran factor es la aparición de la clase media china. ¿Cómo repercute la aparición de esta clase media en la calidad de los productos? Se trata de una cuestión sencilla. La nueva clase que ha surgido debido a la prosperidad económica China cuenta con los suficientes medios económicos para afrontar la compra de productos pero debido a su reciente capacidad económica están exigiendo a los fabricantes un aumento de la calidad de los productos.

Es decir, hasta ahora buscaban el producto al mejor precio, debido principalmente a que no podían permitirse el producto por un precio superior. Pero ahora esta nueva clase media requiere de productos de mayor calidad aunque para ello haya de pagar un precio superior.

Los fabricantes chinos conscientes del poder que supone el mercado chino se han puesto manos a la obra para satisfacer las necesidades de su mercado. A la par estas mejoras están repercutiendo en el consumidor extranjero, que ha visto cómo los productos importados desde China están viendo mejoradas sus características.

El ejemplo más claro de esta nueva tendencia es que empresas chinas están por primera vez en la historia compitiendo de tú a tú con grandes empresas occidentales. Así no es de extrañar la irrupción de Xiaomi o Huawei que son solo dos ejemplo de lo que está por venir.

NUEVAS TECNOLOGÍAS, NUEVOS PELIGROS

Las nuevas tecnologías han abierto las posibilidades han futuro de nuevas oportunidades, pero estas oportunidades también aparecen para la comisión de nuevos delitos.

El IoT (Internet de las cosas), puede ser el futuro pero debemos de estar preparados para afrontar los nuevos problemas que pueden aparecer. Así hemos sido testigos de poderosos ataques como el WannaCry que pusieron en jaque los servicios de multitud de empresas privadas incluso de los servicios de muchos estados.

En el mundo interconectado en el que vivimos en el que cada vez más la información está adquiriendo mayor relevancia hemos de estar preparados.

De la misma manera todas las empresas actuales están controladas por sistemas informáticos que pueden ser objeto de estas vulnerabilidades. Si bien los fallos humanos también existen es más fácil prevenir que ante un ataque “invisible” como los que suelen suceder en estos casos.

Fuentes de vulnerabilidad

Prácticamente no hay ningún elemento que esté exento de vulnerabilidad, pero el más débil o el más habitual es el Sistema de Comandos de Incidentes (ICS).

Otra de las posibles vulneraciones son las actualizaciones de seguridad. Que implican un gran coste económico y de medios, además en la mayoría de los casos requieren de la detención de la producción lo que rara vez ocurre por la negativa de los fabricantes.

Pero a la vez están surgiendo soluciones para intentar luchar contra estas nuevas amenazas:

  • Control a tiempo real de amenazas
  • Realización de una evaluación de vulnerabilidad
  • Investigación de posibles anomalías que puedan suponer un peligro

CHINA LIDERA LA FABRICACIÓN DE VEHÍCULOS ELÉCTRICOS

China se está convirtiendo en una de las potencias de fabricación de vehículos eléctricos, la propia demanda interna de su mercado ha hecho que los fabricantes están respondiendo con un aumento de la producción y una mayor inversión para seguir mejorando estos productos.

La mayor demanda de estos productos y el deseo de abarcar cada vez un mayor número de clientes harán muy probablemente que el precio de los vehículos eléctricos se vaya reduciendo de forma considerable en los próximos años.

Una de las partes más caras y de mayor relevancia en un automóvil eléctrico son las baterías. China es la mayor potencia en este ámbito por lo que en gran parte el éxito del coche eléctrico depende de las decisiones que se tomen por el gigante asiático.


Un inciso, queremos aportar algo importante dentro de un proceso de importación:

Comprar en China desde España. Importar de China. Logística en China. Comercio internacional. Gestionar compras en China. Incoterms, consolidación de mercancias.

RAZONES PARA LUCHAR POR EL MERCADO DE LOS VEHÍCULOS ELÉCTRICOS

Los motivos por los cuales China está interesada por hacerse con el control son muy variados, partiendo claramente de qué se trata de un oportunidad para hacerse dueños de un mercado que está llamado a ser un de los más importantes en los próximos años.

Además China está cada vez más concienciada medioambientalmente y se considera una verdadera oportunidad de dar un puñetazo sobre la mesa y realizar acciones que verdaderamente tengan repercusiones positivas.

Otro de los motivos es que China es el mayor importador de petróleo del mundo, algo que no es una buena noticia. Por lo tanto, una deriva hacia las energías eléctricas y renovables podría suponer una mayor estabilidad del país, mayor seguridad y por consiguiente afianzarse como la gran potencia que es sin depender de manera tan necesaria de conexiones exteriores.

Pero aún así, no se trata de un carrera en la que se encuentren solos. Las grandes compañías automovilísticas del mundo están centrando sus esfuerzos en mejorar el coche eléctrico y hacerlo cada vez más eficiente y accesible para el conjunto de la población.

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